Este es otro artículo que habla sobre la situación de los presos, y una visión positiva. Bárbaro!. Es bueno saber estas cosas, pero también se dejan a luz problemas que no están nombrados en la nota. ¿Es legal que se vendan esos productos?, ¿Están gravados por impuestos?, en una parte de la nota dice que tienen encargues, que venden en las visitas, pero no están habilitados por Bromatología, ¿Cómo es posible que se den esas cosas?, el Estado siempre tiene que dar el ejemplo. Se habla que tienen que sacarse el carné de salud, hoy están vendiendo y no tienen los mismos requisitos que se necesita para vender un pan en cualquier pueblo del interior con mucho menos población y habitantes que en una cárcel, pero además si queremos cuidar a la población, ¿Ellos tienen menos derechos?, piensan en más porque ya hablan de un vehículo para distribuir. Toda esa actividad si la hace el Ministerio, no podría hacerla y sería una competencia desleal, y si lo hace la Intendencia sólo está exenta de IVA si es una venta directa al público pero no pueden venderle a los Comercios – sin IVA – (Título 10 Artículo 6 Literal G), salvo que lo haga la Cooperativa. Es interesante el artículo, lo recomiendo, también el video, revelador y para pensar; ya que Uruguay comenzaría a recorrer el camino del sistema mixto tipo Francia (privadas las cárceles y la guardia del Estado). Lo otro es ver lo que gana un Recluso por un trabajo y lo que gana un Menor “peligroso” cuando sale a trabajar, gana más que los propios funcionarios que lo vigilan (el menor).
Los otros presos
Uno de cada tres reclusos trabaja o estudia. Son alentados desde el gobierno pero en la cárcel son abucheados y tratados de carneros. Aunque su pasado los condene, apuestan al futuro con varias pymes. Y buscan clientes.