En estos días se está hablando mucho de algunas denuncias en un programa de «Vivienda Sindical». Quizás sea sólo eso: habladurías. Pero no está mal que sea tomado este tema como el motivador para que el Estado o el Poder Legislativo, tome la iniciativa y regule no sólo a los Sindicatos sino a todos las Instituciones que no pagan Impuestos. ¿Y qué tienen que hacer?, rendir cuentas. Nada más.
Hace poco, también surgió el tema de los bienes del Pit-Cnt; porque el Presidente les solicitó que pusieran en garantía su patrimonio (para el proyecto Alas U) y la Central de Sindicatos, tomó el guante pero sólo dicen que tienen unos vehículos y alguna cosa más. Por lo cual la oferta de la garantía no llegaba a cuarenta mil dólares. Si cualquier lector más o menos informado hace algunos números sin calculadora, se dará cuenta que algo no está bien. Se dice (hay varios artículos de todo tipo y tendencia) que el PIT-CNT tiene más de trescientos mil afiliados. La cuota sindical varía, no es una cuota fija, pero supongamos que le llega al PIT-CNT un dólar por afiliado (en promedio), estamos hablando de trescientos mil dólares mensuales, en un año serían tres millones seiscientos mil dólares. ¿Qué se hace con ese dinero?. Ni que hablar que no existe tampoco rendición de cuenta de cada uno de esos Sindicatos, si el SUNCA supera los 60 mil afiliados, y nuevamente consideremos un aporte mínimo de 1 dólar por afiliado; estamos hablando de una recaudación de 700 mil dólares anuales. ¿Quiénes manejan esos dineros?, ¿Qué se hace con ellos?. No es un tema interno, es un tema social y si quieren que sea interno, entonces que paguen impuestos (ya que hablan de modificar la Constitución, que también la modifiquen en estos puntos y no sea sólo algo electoral).
La transparencia de una institución necesita organizarse. Para que la gente ejerza su derecho a la información se requiere que haya personas responsables de atender solicitudes de información del público, que se difundan los documentos más importantes en páginas de internet y otros medios y que la organización tenga archivos ordenados y accesibles. Sin instrumentos eficaces de acceso a la información la transparencia es solo una proclama vacía y no pocas veces un vulgar engaño. de Giménez Cacho.